Lamentable, que el ayuntamiento de una localidad que busca vender la imagen de culta y moderna, nos prepare una programación , durante las ferias y fiestas más importantes de su localidad, que son un homenaje a los más primitivos y rústicos formatos de actividades feriales pueblerinas de la España Rural Profunda.
Las actividades feriales son, lo que viene siendo para los taurinos, una jornada animalista completita, toda ella una amalgamada de amor animal el día 25 con remate el día 27.
Las actividades feriales son, lo que viene siendo para los taurinos, una jornada animalista completita, toda ella una amalgamada de amor animal el día 25 con remate el día 27.
A saber, sorteo del choto, encierro infantil y festival taurino a lo largo del viernes y remate el domingo, con la suelta de vaquillas.
La etiqueta para estos eventos obliga a: boina bien enroscada y pantalón de pana pero, se permite la licencia de no ser obligatoria la depilación de la única ceja.
Imaginamos que están ahorrando para construir una Plaza de verdad porque, ahora, no les queda más remedio, a pesar de su manifiesta, palpable y costosa (más de 15.000 euros nos han comentado) admiración hacia lo taurino, que apañarse con una de esas plazas móviles tan de película de los 40.
Sin embargo, conocemos a muchas personas naturales y residentes en esta ciudad que no encajan para nada en este molde ferial, personas que nos han manifestado su desagrado y malestar por esta programación de fiestas que no se acerca, ni de lejos a sus gustos , inclinaciones y opiniones.
A esa mayoría de ciudadanos villanovenses sensibles con los animales, evolucionados y residente en le siglo XXI, desde nuestro respeto, admiración y cariño, paciencia, ya os queda menos y pronto PODREIS cambiar muchas cosas.