La Junta de Castilla y León subvenciona clases de caza en
colegios públicos para niños y niñas. El acuerdo fue firmado a petición
de la Federación de Caza de esta comunidad y para el mismo ya se están
destinando 303.000 euros.
El convenio, que contempla distintas actuaciones, fue firmado por la exconsejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, del PP, partido que gobierna desde hace más de 30 años en Castilla y León, y por el portavoz de los cazadores de la región, Santiago Itumendi Mauregui, exmilitar que preside la federación de caza. Dicho acuerdo, que se remonta al 29 de noviembre de 2010, establece la puesta en marcha de un programa denominado: “Cazador por un día”, dirigido a niños y niñas de entre 7 y 12 años de edad, “en el que al margen de explicarles el porqué la caza es necesaria, se les muestre a través de jornadas prácticas cómo se caza”.
Por su parte, Santiago Inturmendi, para justificar la puesta en marcha de estas clases de caza, llegó a asegurar que el sistema educativo enseña “la cultura del Bambi” –dice el presidente de los cazadores castellanoleoneses–, donde se les dice a los niños que los cazadores son malos y los ciervos buenos”. Tampoco se salvan los medios de comunicación, a los que el cazador acusa también de “intoxicación informativa generalizada contra esta actividad”.
El convenio, que contempla distintas actuaciones, fue firmado por la exconsejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, del PP, partido que gobierna desde hace más de 30 años en Castilla y León, y por el portavoz de los cazadores de la región, Santiago Itumendi Mauregui, exmilitar que preside la federación de caza. Dicho acuerdo, que se remonta al 29 de noviembre de 2010, establece la puesta en marcha de un programa denominado: “Cazador por un día”, dirigido a niños y niñas de entre 7 y 12 años de edad, “en el que al margen de explicarles el porqué la caza es necesaria, se les muestre a través de jornadas prácticas cómo se caza”.
Por su parte, Santiago Inturmendi, para justificar la puesta en marcha de estas clases de caza, llegó a asegurar que el sistema educativo enseña “la cultura del Bambi” –dice el presidente de los cazadores castellanoleoneses–, donde se les dice a los niños que los cazadores son malos y los ciervos buenos”. Tampoco se salvan los medios de comunicación, a los que el cazador acusa también de “intoxicación informativa generalizada contra esta actividad”.