La historia de Marino, parece sacada de una película de terror.


Escapó del incendio en donde le tenían cautivo. Ahí salvó doblemente su vida, de su destino y del incendio. Y a escondidas a lo largo de las vías del tren, pasó varios agónicos días perseguido por cazadores armados con palos y perros.
La astucia, paciencia y esfuerzos de activistas por los derechos animales, consiguieron que, finalmente, Marino cayera en una jaula trampa. De ahí a ser un querido refugiado en el Santuario.
¿Imaginas el terror tuvo que pasar?
Desde entonces, Marino, disfruta de una vida plena y saludable, física y emocional.
Larga vida Marino!!

CONOCE EL SANTUARIO  WINGS OF HEART