
La entidad animalista ATEA solicitó al alcalde de Benavente que indultara a Bonarillo,
el Toro Enmaromado 2014. La prensa local recogió la noticia y abrió una
encuesta: la mayoría de quienes han votado optaron por la compasión.
¿Está cambiando algo en la [rocosa] mentalidad española?
Los
espectáculos basados en el acoso público a animales inocentes generan
ciertas preguntas: ¿Qué clase de educación estamos dando a nuestros
niños? ¿Merecen sus ejecutores atención sanitaria (pagada por todos)
cuando “pierden” una lid que solo ellos promovieron?