¿En qué nos convierte la indiferencia ante el dolor?

En muchas ocasiones los proteccionistas tenemos la sensación de ser los únicos HUMANOS CON OJOS. Sentimos que ninguna otra persona VE a los animales heridos, abandonados, hambrientos, enfermos, accidentados.......Tener estos ojos del alma abiertos es para nosotros un gran dolor cada día pero gracias a ellos muchos animales evitan muertes terribles, grandes dolores, atroces miedos y angustias y en muchos casos, la muerte. 
Esta sensibilidad  es lo que permitió que un pequeño gatito,  un cachorros de pocos meses, que fue atropellado ante una de nuestras socias, sufriera una muerte horrenda durante horas atropellado en la carretera. Gracias a ella, su sufrimiento fue corto, pasó sus último momentos protegido, querido, acariciado, tranquilizado y sin dolor. Abandonó este mundo con dignidad y entre personas respetuosas y sensibles. 
Un veterinario lo atendió y lo sacrificó para que no continuará su sufrimiento y algunas personas lo acariciamos y le hablamos con dulzura mientras se iba. Por poco que sea lo que pudimos hacer por él ahí estuvimos. EN MEMORIA DE ESE PEQUEÑO AL QUE NO LLEGAMOS A PONER NOMBRE, GRACIAS A TODOS LOS QUE TIENEN ALMA Y EN ELLA UNOS OJOS ABIERTOS.